Escrito por Luis Antolín el Publicado en JUEGOS Y JUGADORES.

Gerard Piqué

Otro fútbol y otros futbolistas

De vez en cuando no es una lectura sino un hecho o un ambiente determinado el que te lleva a pensar en la presencia del deporte en el día a día. En esta ocasión, como no podía ser de otra manera, el tema es el de Cataluña y la actitud de Gerard Piqué.

Se dice del deporte que es bueno para superar las diferencias entre las personas y los grupos sociales, pero no es así. Los insultos y los pitidos a este futbolista que, piensa diferente y juega al nivel que el mejor, dejan claro que no importa lo que te esfuerces si tu pensamiento se sale del carril.

Es evidente que la mayor parte de la afición futbolística es especialmente cerril y que no entiende del juego otra cosa que ganar a toda costa y humillar al contrario, si se puede. Y si no pueden entender el valor del esfuerzo en un juego, ni imagino que entenderán de justicia social, de libertad, de igualdad, democracia…

A lo que iba es a esto de las nacionalidades y el fútbol. No crean que es un erial el fútbol en materia de nacionalismos e independentismos. Sin ir más lejos José María Belausteguigotia Landaluce (Belauste), militante del Partido Nacionalista Vasco, es el autor del gol que, en la olimpiada de Amberes de 1920, dio origen, a su pesar, al esperpento de la Furia Española deportiva, tan querida y manoseada en la dictadura.

Por cierto, si de coraje hablamos, vaya imagen la de Carles Pujol y Gerard Piqué saltando al alimón para marcar el gol a Alemania que daría paso a la final del campeonato de Sudafrica y la mayor gloria del fútbol español. Resuelta por otro jugador del Barcelona (Iniesta, recientemente renovado en el Barcelona per sempre).

En realidad, la patria del deporte es el dinero, por eso callan tanto los deportistas. Ya se ha dicho que la independencia de Cataluña puede ser ruinosa para el Estado español, por eso, también por eso, Piqué es un enemigo.

Al fútbol le van más lo cuellos rotos de amor patrio y ardor guerrero que Raúl exhibía como nadie, en tiempos en que la selección española perdía como siempre. Aunque tampoco pasea mal el fútbol las banderas y los brazos en alto.

Pero el fútbol también es, sobre todo fue, refugio de sueños de igualdad y de insumisión. Me encanta el avatar anarquista de CE Jupiter de Poble Nou. Y, cómo no, una lectura, Futbolistas de izquierdas de quique Peinado.

Nada nuevo bajo el sol. Ni es nuevo que haya futbolistas con ideas propias, ni que los aficionados no entiendan del juego otra cosa que el eco que en su mondongo hace la consigna del patrón.